Márquez ha clasificado cuarto para el Gran Premio de Aragón de MotoGP, y saldrá desde la segunda fila. Pese a que ha rodado muy bien durante todo el fin de semana el de Cervera no lo tiene claro: «evidentemente, un podio sería un regalo, aunque será difícil«.
«De momento no tengo el nivel o la capacidad de hacer todas las vueltas al máximo, de la primera a la última, y aquí estoy sufriendo más que en Alemania, porque allí el circuito es muy especial, no hay cambios de dirección apenas y me encontraba más cómodo, pero aquí no estoy preparado, no tengo el nivel suficiente o el físico suficiente para hacer todas las vueltas a tope como me gustaría».
«Tengo el nivel suficiente para estar delante, así que veremos cómo puedo gestionarlo, pero las Ducati van muy rápido, sobre todo Bagnaia, también Quartararo, Mir y por eso, evidentemente, un podio sería un regalo pero será muy difícil», recalcó para la carrera de mañana en el circuito de Motorland.
«Las sensaciones de este fin de semana han sido buenas desde el principio, el FP1 fue bueno, el FP2 también, y cuando saqué neumático nuevo igual; en el FP3 me costó un poco más pero por la mañana siempre me cuesta un poco más y en el FP4, que es la referencia de la carrera, está bien».
«Ahora tendré que ver mañana cuánto bajo físicamente, porque hoy he notado que he bajado un poco, y a partir de ahí tendré que ver cómo estoy y salir a la carrera con ganas de apretar y de intentar estar delante».
«Quizás la caída de ayer sobraba, pero la de esta mañana siempre puede pasar ya que aprietas, te tienes que clasificar y has de tomar riesgos. La de ayer sí que dio más rabia y se pudo ver en televisión, pero son caídas que pasan y que simplemente hay que asumirlas, aunque de momento no son importantes», añadió.
«Evidentemente es una situación extrema que no había vivido nunca, muy difícil, y no se lo deseo a nadie, pero de momento lo estamos solucionando de la mejor manera posible y es verdad que en esta situación han llegado muchas caídas y que la mitad de ellas las hubiese salvado, pero esta es la situación y no existe ya la palabra ‘salvada’ en mi diccionario», reconoció el piloto de Repsol Honda.
«Cuando se va y no puedo salvar la caída, mientras que antes salvaba muchas caídas y ahora puedo poner el ejemplo de la que he sufrido en el FP2 y el FP3 en las que se me ha ido un pelín y era una salvada fácil, pero no ha podido ser de momento», agregó.
«Tengo que pilotar de una manera diferente y es una situación complicada, pero parece que soy capaz de ir gestionándola y todo y así estoy cerca de los pilotos de delante, para mí la situación fácil sería cortar más, estar el décimo, y mirar las cuentas, pero no es mi mentalidad ni soy así, y no creo que sea la forma de llegar donde quiero así que, de momento, sigo mi camino intentando olvidar un poquito lo que se crea alrededor y centrándome en mí mismo», concluyó Marc Márquez.
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