Carlos Sainz terminó séptimo el Gran Premio de Países Bajos, en la que definió como «una carrera muy rara».
«Ha sido una carrera muy rara. Desde la segunda o la tercera vuelta ya veía que no tenía ritmo y que el coche se deslizaba mucho más que en los entrenamientos libres y mucho más que en la calificación», explicó el español de Ferrari.

«Ha sido raro. Poco a poco me iba yendo hacia atrás. Iba desgastando mucho neumático para aguantarle el ritmo a los de delante».
«Y, al final, cuando esperaba hacer una carrera al ataque, atacando a Pierre Gasly y a Charles Leclerc, acabé mirando los espejos porque no iba nada», manifestó Carlos Sainz.